Por Alejandro Castillo
El Juego 1 de la Serie Mundial llegó. Dallas era la ciudad que recibía el primer encuentro de la pelea por el Trofeo del Comisionado.
Sin duda, este Juego 1 de la Serie Mundial era sólo el inicio de varios episodios que enfrentarían a los Texas Rangers y los Arizona Diamondbacks. Ambos equipos llegaron como ‘underdogs’ a esta Serie Mundial, pero eso no importaba ya.
Dos comodines se enfrentaban en esta pelea por el título de la MLB. Por una parte, Arizona buscando su segundo Trofeo del Comisionado, y por otra Texas, que estaba en la lucha por su primer campeonato de las Grandes Ligas, en su tercera aparición en este escenario.
Por una parte, los Rangers, favoritos, llegaron tras derrotar a los Houston Astros. Texas derrotó al mejor equipo de la Liga Americana y, con gran pitcheo, se mereció este pase a la Serie Mundial. Nathan Eovaldi, Max Scherzer y Jordan Montgomery eran las figuras entrantes.
Por otra parte teníamos al equipo caliente y el conjunto de la gente. Con el bat encendido y con un pitcheo decente, pero con mucho corazón, el conjunto de Arizona, comandado por Zach Gallen y Corbin Carroll, llegaba a luchar por el título.
El conjunto de los D-Backs hizo lo que sólo ellos saben hacer. Sin duda, el trabajo de este equipo es a base de corazón, y de saberse los no favoritos. Texas le pegó primero a Zach Gallen, mano de Marcus Siemien, Corey Seager y Adolis García, obviamente.
Sin embargo, entre Corbin Carroll y Ketel Marte, entre otros, lograron impulsar carreras y aprovechar errores para llevarse el encuentro 5-3, con un bullpen espectacular por parte de este equipo, que toma ventaja y asegura, al menos, los tres partidos en su estadio.
Esto, hasta que Corey Seager se voló la pelota en la novena entrada para darle el empate al conjunto de Texas. Esto mandó todo a extra-innings. En la baja de la onceava, Adolis García se la voló y le dio la victoria al conjunto local.
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